En el pequeño
hueco del vagón de tren. Como en las tragedias románticas.Cuando menos lo
esperaba. Como menos lo esperaba.
A cinco minutos
de mi- nuestro- destino.
Yo miraba mi
móvil pendiente de cualquier correo de última hora que contestar. Lo dejé en mi
bolso y llevé mi vista hacia el otro lado, y te vi.
Tú me mirabas,
como lo has hecho siempre. Ya me estabas mirando cuando mis ojos te alcanzaron,
y no apartaste la mirada cuando yo dejé la mía en ti.
Absorbiste mi
vida a través de la intensidad de tus ojos.
Nos separaban
dos personas.
Había imaginado
ese momento en miles de ocasiones.Casi una década sin vernos y creí saber lo
que hacer. Tenía escrito mentalmente un diálogo para cada situación, fuera
divertida, difícil,romántica...Pero era mentira...Me había estado mintiendo...
No estaba
preparada para volver a verte. Nunca lo estaré.
Noté como mis
manos empezaron a temblar pero sentía tu mirada en mi, siempre has sido incapaz
de dejar de mirarme...Era algo que al principio me desquiciaba de ti y después
adoraba...:tu mirada eterna.
Comencé a
recordar miles de imágenes en el minuto que le quedaba a nuestro tren hasta la
estación y perderte de nuevo. Mientras tú seguías mirándome en esas décimas de
segundo con la sonrisa en la comisura de los labios y yo muriéndome sin
saber qué hacer...
Bajaría de ese
tren y te perdería..huiría, pero ¿no me seguirías?
Me
paralicé..hasta que dos segundos después cambiaste de posición y te vi de cuerpo
entero..no eras tú.
.... desde
entonces te veo en cada mirada profunda...
PD. La foto tampoco es suya..pero también es de una intensa y preciosa mirada...
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