Hay días que se rompe el alma.
Se desgarra.
El corazón deja de latir aunq sea sólo un segundo.
Silencio.
Suena un grito seco y profundo como el de un trueno en una
tormenta de verano solo que en esta ocasion no ha venido precedido por un
relámpago que nos haya permitido presagiarlo. Quiza si. Pero no quisimos verlo.
Y a partir de entonces continuas con tu alma hecha
pedazos como si pudieras ser un todo, como si la vida fuera fácil, como si cada
paso no te costara respirar como en un ocho mil..ese es tu mundo ...un mundo sin alma.
PD. Para V y para A porque son la calma después de la tormenta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario