miércoles, 26 de septiembre de 2012

DE MAYOR QUISIERA


De mayor quisiera vivir en una casa de enormes cristaleras en medio del bosque, en la que por la noche sólo se alumbrara con las velas y la chimenea.
Y quisiera un enorme vestidor en el que cupieran miles de vestidos de alta costura, con cientos y cientos de zapatos de Manolo Blahnik y Jimmy Choo y Louboutin…
De mayor quisiera levantarme por la mañana y ver a través de los cristales de esa casa las nubes plateadas en el cielo de Madrid y sentirme en paz y serena..
Y a lo largo del día saber que soy feliz, un ratito..solo un ratito..
Y pasar fines de semana en Paris…
Y dejar que él me mimara, como sólo él lo hace…como sólo con él me dejo…
De mayor me gustaría seguir siendo niña, y escribir cosas infantiles como esta..y pasear por las calles mojadas de Madrid, y perderme en mil tiendas en busca de un regalo perfecto e inesperado para darle un día cualquiera, cuando no lo espere, sólo porque si, porque lo quiero, porque no lo espera, porque me hace feliz, porque es el mejor..
Y empecinarme en tener razón aunque sé que no la tengo cuando jugamos al ajedrez y al final acabar riendo sólo para chincharle.
Quisiera ver películas antiguas, en blanco y negro, e ir al cine una vez por semana.
Y hacer locuras..bailar en mitad de la calle, comprarme un caballo y gritar “te quiero” en la oscuridad…
De mayor quiero no perder la inocencia y ser capaz se susurrar, y seguir andando descalza por todos sitios..
Y quisiera poder ser capaz de besar con la misma dulzura, y de querer con la misma pasión, y de no tener miedo a que me hagan daño..
Ojalá pudiera seguir leyendo todos mis libros, en un rincón con poca luz, con mi manta, acurrucada, esperando junto al móvil su llamada de cariño…
Y emocionarme con las mismas palabras de amor y gestos de ternura, con las risas en una cena cualquiera, con los episodios de una nueva temporada de cualquier serie, con la complicidad en las miradas…
Y al llegar a casa, por la noche, después de la larga jornada, darme una ducha y tumbarme en el sofá a esperarlo y saber que cuando llegara, me abrazaría, y uno solo de sus besos acabaría con todos los problemas del día, con todos los problemas del mundo, porque él me quiere, porque él elige cada día estar a mi lado, porque él lucha por nosotros…
Y al mirarlo dormir cada noche, y al estar entre sus brazos cada noche estrellada, al escuchar la lluvia en la ventana y sentirlo a mi lado apretándome fuerte contra él para sentir mi olor, saber que soy feliz, porque los días serán complejos, porque discutiremos, porque tendremos momentos de no entendernos, o de enfadarnos, pero tendemos lo mas importante, amarnos con toda la fuerza del mundo.

De mayor, de mayor quisiera esa felicidad..pero son solo sueños…

Una de las maravillosas casas de Joaquín Torres...hechas para soñar...para ser felices..

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